Hay veces en que las cosas cambian.
La mayoría de las veces no es un cambio radical de esos de "guau, te has cortado el pelo".
Mas bien se tratan de pequeños cambios, paulatinos, intrascendentes, tan diminutos que cuando te vienes a dar cuante se han instalado sin que los hayas vivido como extraños en su momento.
De repente un día dices "¿desde cuándo está esto aquí?". Pero es tarde, ya está ahí.
Cambia el invierno a primavera, alternando días fríos con otros cálidos hasta que un día recuerdas que no sabes dónde has dejado el chaquetón o el paraguas...
Así, yo ya no sé cuando mi resfriado se ha transformado en alergia.
6 comentarios:
Pues vaya cambio, prefiero seguir pensando que tengo un resriado muy contumaz, ya tengo bstantes teclas.
Ojala te sea lo más leve posible.
Es que el catarro y la alergia forman parte del mismo contínuo espacio-tiempo. O algo así. :P
Cuídate.
Besitosss
Sí, sí, Naray, Elysa, mil veces mejor el resfriado porque sabes que tarde o temprano se irá.
Jajaja, Gaearon, el mismo contínuo espacio-tiempo...¡qué cosas!
Si es alergia primaveral en algún momento pasará, mientras tanto toca cuidarse...
Un besazo!
Y así como viene la alergía, ni te darás cuenta cuando ésta vuelva a ser sólo un resfrío.
Saludos (:
Ains, Ilian, ¡Qué razón tienes!
Publicar un comentario