domingo, 8 de noviembre de 2009

"Ese vaso, ahí, se cae" o el masoquista emocional.

Todos conocemos a alguien así, yo diría más, seguro que en algún momento hemos asumido el papel de agorero heredado quizá o aprendido de nuestras madres o abuelas.
Mi abuela, en concreto, es especialista en esto. No dejaba de recordarnos cada cinco minutos cuales eran los peligros que nos acechaban a la vuelta de la esquina.
Pero ella no se conformaba con decir "esa niña se va a caer de la resbaladera", noooo, ella afirmaba: "esa niña se cae y se va a romper una pierna y como no le cure bien y se quede coja, verás" o peor aún:"Se te van a salir los sesos cuando te abras la cabeza con la dichosa bicicleta" Bueno, ni me quedé coja ni se me salieron los sesos ni ná, pero sí me caí unas cuantas veces y qué cara de satisfacción cuando decía a voz en grito: "¿lo ves? ¿lo ves?"
En realidad no se alegraba de mis caídas, pero disfrutaba cada segundo que transcurría desde su aviso hasta mi batacazo. Es más, los días que no me caía, tropezaba, resbalaba, cortaba, desollaba o era sacudida por algún malandrín no se iba contenta a casa, ya que si no me había pasado nada hoy me podía pasar mañana.
Era lo que yo llamo una masoquista emocional.
Le gustaba sufrir el miedo y la angustia de lo que pudiera pasar antes de que ocurriera realmente.

Todos tenemos miedo de que ocurran o no ocurran cosas pero hay quién los busca, los desea, los disfruta. Da igual de qué se trate, el masoquista emocional se angustia por todo: si no encuentra trabajo porque no lo encuentra, si lo encuentra por que a ver que le va a pasar en el nuevo empleo, si se queda por que se ha quedado y si se va por sí mismo porque se ha ido.
El caso es que viven del miedo, se alimentan de la angustia y se hacen adictos a la preocupación.
Hay quien llora por no tener la luna en las manos y cuando la consigue llora porque no sabe qué hacer con ella.

Tengo una amiga (plañidera en una vida anterior seguro) a la que le ocurre esto, y a mí misma, confieso, me había dado por no dormir pensando en el porvenir: el paro, la crisis, el fin del mundo en el 2012...
Ahora le cuento todo a ésta amiga y es ella la que no duerme por las noches. En cambio yo duermo a pierna suelta sabiendo que hay alguien que se preocupa en mi lugar...
Yo, tranquila. Ella, infeliz... y todos contentos.
¿Alguien más se apunta?

5 comentarios:

petaqui dijo...

Yo tengo miedo del futuro, pero del futuro con una persona a la que quiero, pero es muy dificil la relación, nos separan 3 horas y nos vemos poco, unas dos veces al mes. Esto una mierda, lo del amor cuando es dificil y esas cosas jeje
Buena blog ;)

barbaria dijo...

Bueno, si solo os separan tres horas podríais intentar veros más a menudo ( mi cuñao recorría más de medio país para venir a ver a mi hermana un par de horas y volverse porque no tenía nada más que un día libre, eso era amor)pero creemé, da más miedo cuando las cosas se tienen cerca, muy cerca y convives a diario y se aprecian más las inperfecciones. El poco tiempo que os veáis tiene que ser muy intenso ¿no?. Pues aprovecha...

Camaleona dijo...

Cuando mis hijos no me hacen caso y ya he agotado todos los recursos, utilizo la táctica de tu abuela... si no me das la mano, pasará una moto y te aplastará y todo se llenará de sangre y llorarás un montón... pero nada, ni caso... así que gracias a mis hijos no puedo desarrollar como me gustaría mi masoquismo emocional...

Yandros dijo...

Jajajaj he conocido mucha gente así. Mi abuela no quiere salir mucho porque "¿y si me resbalo?" o "si hombre, con la de atracos que hay ahora"
Un saludo, me gustó esta entrada

yokopatri dijo...

pues yo creo que después de esto, he descubierto mi "intermitente" masoquismo emocional, a veces pienso que no quiero hacer algo por si luego me arrepiento. pero a día de hoy intento pensar que mejor hacre las cosas que uno siente, y luego ya habrá tiempo de pensar en arrepentimientos. hay que disfrutar la vida, y si nos caemos, ya nos levantaremos, que si seguimos vivos, tenemos que luchar y seguir adelante (este pensamiento super positivo viene justo despues de colgar el telefono a una persona, pensando, creo que le importo una mierda...con perdon de la palabra mierda, pero luego he pensado que no, que si le importase una mierda, no habria estado una hora hablando por telefono conmigo y soportando mis tonterias...al fin y al cabo para algo estan los amigos...)

mua! un abrazo!