sábado, 22 de diciembre de 2012

Yo lo sabía...

...pero nadie me creía.
Cuando decía que no iba a acabarse el mundo y daba mi razón... Sí, era una sóla... ¿y qué?
Era contundente e indiscutible pero la gente, en lugar de sopesarla, se limitaba a reirse como si hubiera contado un chiste malo.
Jopé, yo escuchaba todas las teorías catastrofistas y asentía tratando de meter baza...los Mayas, Nostradamus y hasta las señales del apocalipsis...todo enfocado a esa fecha...
Al final lograba captar su atención gracias a mi carisma (a eso o a la mano levantada y los saltitos que estuve dando media hora) y aclaraba mi garganta antes de expresar mi argumento:
_ ¿Pero no se os ha ocurrido que después de haber trabajado en el calendario alguien dijo: "bueno, vale ya, con esto es suficiente...total, para lo que nos pagan"...?
Pero ni caso, oye, ni caso.
Si hasta el del bar de mi esquina puso en la pizarra que anuncia las tapas del día:

Hoy
Fin del Mundo
A las 2:00 Caldereta y cerveza  a 1 euro.

Por eso no escribí la entrada ayer para aconsejaros que siguierais con vuestra vida tal cual, anduve de tapitas...

4 comentarios:

X dijo...

¿Cómo se iba a acabar el mundo, con todo lo que nos queda por hacer? :-)

barbaria dijo...

Pues a mí más...

Tequila dijo...

Pues yo deseaba que se acabara... ¿cómo que os quedan cosas que hacer? A mí no me queda nada por hacer ya, ya lo he hecho todo y estoy satisfecha con ello... yo hubiese preferido que se acabara el mundo joooo...

Elysa dijo...

¡Ah! ¿pero no se ha acabado? Y ahora como explico la "desaparición" de mi vecina cotilla? En fin ¡qué decepción con los mayas estos!

Besitos