lunes, 29 de octubre de 2012

La vida en una empresa en crisis

Vivir en un barco que se hunde es todo una aventura.
Que se lo digan a Leonardo DiCaprio ¿no?.
Pues sí amigos y amigas.
Poco antes de irme de vacaciones, el ordenador que usábamos empezó a fallar, no se qué de la tarjeta gráfica...Pues a la vuelta me encuentro con el teclado y la pantalla huérfanos de una torre.
_Se la han llevado para arreglarla._ me dice mi compi.
Guay.
Me encanta mi ordenador y tener todas la historias clínicas actualizadas y los informes hechos y  decir ¡yo, ya! cuando piden los registros, informes y programaciones.
Pero el ordenador no aparece.
Cuando una mañana me encuentro, o mejor dicho, no me encuentro en el despacho ni la pantalla ni el teclado me ilusiono pensando que pronto va a estar completo y en su sitio.
Pero no.
Me entero por radio patio (increible como funciona ese aparatejo y más en tiempos de crisis) de que mi ordenador no va a volver.
Me remango mentalmente (porque mi uniforme tiene las mangas cortas) y subo echando humo al despacho de la directora.
_Que digo yo, que pronto hay que hacer las evaluaciones anuales y que a ver si se llama al informático para que nos traiga el ordenador que va haciendo falta...
_No, Barbaria, por órdenes de "la empresa" no vais a tener ordenador.
_(¿Comoooorl?) Pero eso es imposible, hace falta para esto y esto y lo otro ¿y si pasa esto, esto  y lo otro?
Vamos, es que es necesario que yo tenga esto, esto y lo otro..porque es una herramienta básica en mi trabajo.
_Lo comprendo, tienes razón, pero...
No la oigo... se me ha subido la sangre a la cabeza.
Míralo, ahí está, si parece que hasta me habla...mi ordenador en la mesa de su despacho...Le han acoplado una pantalla plana, y un teclado inalámbrico. Pero yo lo reconocería en cualquier parte. Pobre...tiene forzadas las puertecillas que tapan los puertos USB y el lector (porque no hay que tirar de ellas sino presionarlas en un borde). Me llama lastimero, me hace mirar los post it rosas que cubren su negro costado...
_Pues el servicio de fisioterapia necesita manejar toda esa información, Fulanita, así que haber como lo arreglamos.
La rubia platino ladea pensativamente la cabeza y opto por iniciar mi mutis mientras ella se come el coco.
Cuando alcanzo la recepción me llama con entusiasmo.
Trae una sonrisa de oreja a oreja y la solución en sus manos.
Señoras.
Señores:
Les presento mi nuevo equipo de almacenamiento y gestión de datos:


Y ni un boli ni ná...hay que joderse...




viernes, 12 de octubre de 2012

Otoño


Me alcanza la noche antes de haber tenido tiempo de esperarla.
Me llega el frío mientras las mangas largas siguen durmiendo en los cajones.
Me llega la lluvia, ligera, menuda, tiñendo de gris oscuro las aceras.

Me llega...
... o me llegaría si no fuera porque a estas alturas seguimos teniendo  30º de temperatura y no sé si para el puente me iré a una casa rural en la montaña para encender la chimenea o a la playa...total, aún no he guardado el bikini... y no es que me disguste el calor, no, (los más antiguos sabéis como odio el otoño) es que ya me aburre de llevar la misma ropa. Y es que, aunque en las tiendas se empeñen en ponernos es aire acondicionado a tope para tentarnos con suaves y cálidos tejidos, es salir a la calle y darte cuenta de que no vas a poder estrenarlas hasta reyes, por lo menos.
Dichoso cambio climático...